Es a comienzos del siglo XIX, con la publicación de las primeras tiras cómicas, cuando el cómic nace y rápidamente empieza a consolidar su lenguaje. Un código particular que combina imagen y escritura, y que si bien bebe de artes como la pintura o la literatura, no tarda en encontrar su fuerza propia para brindarnos algunos de los relatos y personajes más icónicos e influyentes de la cultura popular.